Jesús Castañón Rodríguez
Se cumplen las bodas de plata de
Idiomaydeporte.com, un proyecto digital de carácter personal respetuoso,
humilde y perseverante cuya larga trayectoria ha estado motivada por ser una
fase de globalización y digitalización de una labor que ya alcanza los 43 años
de existencia, así como por haber sido concebida como el viaje en constante
transformación de un peregrino por los sorprendentes caminos del idioma.
Los antecedentes de este proceso
de dar a conocer las reflexiones sobre idioma y deporte para el intercambio
cultural y científico se remontan a 1997 y 1998 con la publicación de diversos
artículos en Argentina, Brasil y Estados Unidos. En 1999 comenzó la propia andadura
que exigió un gran esfuerzo para dar cabida a aspectos del deporte moderno
alejados de los criterios comerciales y de las tendencias a no atender al
conocimiento especializado o a centrar el interés solo en las formas de
expresión más cultas.
Estos 25 años han registrado
numerosas anécdotas y recuerdos personales, pero esta celebración merece más un
repaso de obras, hechos y datos objetivos. Ha sido un tiempo de
transferencia generadora de valor social que ha despertado el interés de
instituciones, bibliotecas nacionales, libros… y, según se documenta en algunas opiniones aportó
trabajos fundacionales en lengua y literatura. Además, ha tendido influencia
cultural al servir de inspiración para
nuevos recorridos en 233 trabajos de investigación universitaria y al merecer
la cita y la referencia en 86 libros.
Todo ello ha sido posible al
combinar cinco rasgos.
Primero, su carácter de punto de
encuentro que acoge la aportación de diferentes puntos de vista de diferentes
continentes, en especial, América y Europa y que ha combinado capacidades globales y locales para crear, estructurar y
participar en encuentros especializados. Ha establecido relaciones deportivas y
culturales que han dado como resultado las menciones en cinco
volúmenes sobre el deporte y
cultura, español actual, lexicografía y literatura y fútbol en la editorial
Routledge, en un manual de Oxford sobre historia del deporte, en cinco/seis
estudios lingüísticos publicados por Peter Lang, más de treinta citas a
la página web en Google Académico.
Segundo, su
apuesta por una constante actualización e innovación tecnológica que
obligó a una permanente formación.
Tercero, ha prestado una colaboración desinteresada en la Comisión Científico-Técnica, la Comisión de selección de fondos bibliotecarios, el Comité Científico, el Comité de Arbitraje, el Comité de Honor y el Consejo Asesor de publicaciones digitales de Argentina y España.
Cuarto, ha desarrollado una perseverancia constante. Forjó una cadena de orden y de progreso graduada en etapas y objetivos para evolucionar de la mera producción de textos a
participar en libros y
desarrollar una dimensión educativa y cultural que ofrecía criterios seguros y
bien documentados en actividades universitarias.
Y quinto, fomentó la creatividad
al partir desde cero, al superar el uso del periodismo como fuente documental
porque como dijo Isidoro Fernández Flórez, primer periodista que entró en la
Real Academia Española en su discurso de recepción en 1898, el periodismo
conforma un sport literario o
ejercicio atropellado del pensamiento y de la palabra que obliga a vertebrar recursos
ante la rapidez de los hechos y las exigencias de la moderna comunicación. Ha
tenido en cuenta las aportaciones de las formas de expresión del lenguaje
deportivo cuando han aumentado el caudal lingüístico de generaciones anteriores
sin afearle con las novedades recientes.
Este recorrido por 25 años
de idioma español en el deporte, el viaje personal, los objetivos, las etapas
de producción, las claves de trabajo, la formación recibida e impartida, la
creación de secciones de orientación lingüística, los reconocimientos y premios,
las opiniones ajenas y el trazado de una cronología básica… se complementarán
en diciembre con un repaso a la presencia de Idiomaydeporte.com en los libros. Ha
sido toda una aventura.
Gijón, noviembre de 2024.